De este modo, se ha definido la composición del tribunal que llevará a cabo el juicio contra Cristina Kirchner por la denuncia presentada por el difunto fiscal Nisman.
Los tres magistrados seleccionados para presidir el juicio oral sobre el supuesto encubrimiento de los acusados por el atentado a la AMIA, quienes habían aceptado la recusación planteada por una de las acusadas, Cristina Fernández de Kirchner, fueron confirmados para intervenir en la causa.
Los jueces Fernando Canero, Germán Castelli y Enrique Méndez Signori desestimaron las recusaciones presentadas tanto por la ex presidenta como por el ex viceministro de Justicia y actual titular de la cartera judicial bonaerense, Juan Martín Mena.
Así, quedaron ratificadas las designaciones de Rodrigo Giménez Uriburu, Andrés Fabián Basso y Javier Feliciano Ríos, quienes en diciembre pasado habían consentido apartarse del expediente para intervenir en el juicio oral por la Causa Memorando.
Cristina Kirchner y Mena habían coincidido en los argumentos de sus recusaciones, sosteniendo que los tres jueces debían ser apartados del caso por las mismas razones que llevaron a la remoción de la jueza Sabrina Namer.
Los jueces Ríos y Basso «integraron el Tribunal Oral en lo Criminal Federal número tres en la absolución de Carlos Telledín de la acusación de haber participado en el atentado».
Por su parte, el juez Giménez Uriburu «se había desempeñado como prosecretario del Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Federal número nueve, a cargo del entonces juez Galeano, cuya relación motivó que el nombrado se excusara de intervenir en la causa por el encubrimiento del atentado a la AMIA».
En ese caso, el ex juez Juan José Galeano terminó condenado a seis años de prisión y ese expediente está aún a estudio de la Cámara Federal de Casación.
La jueza Namer, quien estaba designada en el tribunal que debía juzgar a los imputados por el presunto encubrimiento de los iraníes acusados por la voladura de la mutual judía, fue apartada porque integró la fiscalía especial UFI-AMIA.
Cristina Kirchner y Mena entendieron que ese apartamiento debía hacerse extensivo a todos los jueces que hubieran tenido alguna relación con causas vinculadas con el atentado contra la AMIA.
Pero los jueces que rechazaron las recusaciones diferenciaron la situación de Namer de la de los tres jueces recusados porque «ninguno ha revestido un rol semejante», por lo que «los extremos de dicha decisión no pueden extrapolarse, en modo alguno, al caso traído a estudio».
Namer intervino en la Causa AMIA «no solo como parte en la investigación del atentado, sino además como cotitular del órgano que formuló la denuncia que dio inicio a estas actuaciones, en cabeza en ese entonces del fallecido fiscal Alberto Nisman», dijeron los jueces que rechazaron la recusación.
«Ni la intervención de los jueces Ríos y Basso, como integrantes del Tribunal Oral en lo Criminal Federal en el juicio que finalizó con la absolución del imputado Telledin, ni la participación que habría tenido Giménez Uriburu en el equipo de trabajo conformado por el titular del juzgado instructor en el caso AMIA, constituye una situación semejante a la considerada en el antecedente que traen a colación», insistieron.
Mena había añadido a su recusación la cercanía del juez Giménez Uriburu con el ex presidente Mauricio Macri, a raíz de su participación en partidos de fútbol disputados en la Quinta Los Abrojos, del ex mandatario, en la provincia de Buenos Aires.
Pero el tribunal respondió que «las aseveraciones que sostiene la defensa (sobre temor de parcialidad) se fundan en meras especulaciones de su parte».