Tanto el presidente como la gobernadora dejaron en claro que están dispuestos a mantener la disputa con los maestros, ante la percepción de que hay un desgaste de las protestas.
En la estrategia del oficialismo, no habrá cambios. Si bien la negociación está en manos de la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, el presidente Mauricio Macri tomó la confrontación con los gremios docentes como un combate sin tregua.
Durante la inauguración del Centro de Trasbordo de Constitución, el mandatario describió el conflicto con los maestros de la provincia, que ya lleva un mes -sólo hubo seis días de clases en cuatro semanas-, fueron deliberadas y con un objetivo claro: mostrar que no darán el brazo a torcer.
«No tenemos que detenernos frente a aquellos que quieren que este cambio no avance», dijo Macri, con Vidal a su lado. La gobernadora usó una frase similar: «Mi pregunta es si queremos dar las peleas en serio o queremos volver a lo de antes«, afirmó.
Cabe destacar, que la gobernadora tiene indicios de que el nivel de acatamiento a los paros descendió esta semana y deslizó que es cada vez más débil, con una adhesión del 35%. El ministro Hernán Lacunza dijo que bajó del 60% al 30%.