Es un edificio que le compró al Grupo Bemberg. Hoy se terminó de comprobar que la Procuradora benefició con dos contratos millonarios a esas empresas.
La Procuradora General de la Nación, Alejandra Magdalena Gils Carbó se encuentra nuevamente en la mira de la Justicia. En esta oportunidad se confirmó que le alquiló un departamento mediante dos contratos millonarios y sospechados por falta de transparencia, a empresas del Grupo Bemberg.
El primero, es la compra del edificio de la calle Perón 667 donde funciona la sede central del ministerio público. El otro caso, el más novedoso, es un alquiler a la familia Bemberg de una oficina ubicada en la calle Perú 143. Por una de esas operaciones, Gils Carbó está imputada en la Justicia por posible corrupción.
Según publica el diario Clarín se trató de un proceso administrativo señalado dentro de la propia Procuración por sus falencias y omisiones en su tramitación. El contrato estipuló que esa operatoria duraría tres años: la suma para abonarle a esa firma privada fue de $ 2.700.000 pesos.
Los jefes del organismo avalaron que se le pague a una compañía de los Bemberg llamada Tainaul S.A un alquiler mensual de 75 mil pesos por un departamento en el piso 13 de un edificio ubicado en la calle Perú 143. El contrato estipuló que esa operatoria duraría tres años: la suma aprobada oficialmente para abonarle a esa firma privada fue de $ 2.700.000 pesos.
