La gobernadora abrió el 147° periodo legislativo en Buenos Aires. Con tono electoral, dijo que “parte del legado que vamos a dejar es que el próximo gobernador, sea del partido que sea, va a contar con más recursos”.
La gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, inauguró el 147° periodo legislativo en la Cámara de Diputados. Más temprano ya lo hicieron en la Legislatura de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, y en el Congreso Nacional Mauricio Macri.
Tras ser recibida por el titular de la Cámara Manuel Mosca, la mandataria comenzó haciendo un breve repaso de su gestión a lo largo de estos tres años. “En 2015 dije que la provincia dolía y les prometí un cambio profundo. Ahora cambiaron los bonaerenses. Fueron ellos los que cambiaron el gobierno hace tres años y en 2017 apoyaron esa decisión. Parte del legado que vamos a dejar es que el próximo gobernador, sea del partido que sea, va a contar con más recursos”.
“En un año donde van a escuchar muchos discursos, les voy a hablar con la verdad, como siempre”, indicó la funcionaria en referencia a las próximas elecciones. “Voy a hablar sin verso, la realidad no se cambia con relatos, sino con trabajo, dando peleas difíciles. No hablo de mí ni mi equipo de gobierno. Esta legislatura cambió, se redujeron cambios necesarios. Empezaron a presentar sus declaraciones juradas. Tenemos una nueva ley de enjuiciamiento de magistrados. La relación con el gobierno nacional también cambió. Ya nadie se pregunta si el gobernador y el Presidente se comunican, es lo normal que lo hagan”.
Y agregó: “Dimos discusiones difíciles como la del fondo del conurbano. No se daba porque significaba terminar con las aspiraciones políticas y enfrentarse con los gobernadores. Fuimos a la Corte y recuperamos lo que nos corresponde. Vamos a seguir peleando por lo que hace falta. Tiene costos dar peleas, incluso al interior del propio espacio político”.
“Nosotros no somos lo mismo. Me eligieron para defender los intereses de los bonaerenses y eso, no es negociable”, cerró Vidal.