El contador arrepentido amplió su declaración, y dijo que el diputado y Cristina “decidían todo” respecto a las firmas Hotesur y Los Sauces.
El ex contador de la familia Kirchner y arrepentido en la causa de los cuadernos, Víctor Manzanares, volvió a declarar ante el juez Claudio Bonadio y se refirió al rol “protagónico” que tuvo Máximo Kirchner en las empresas investigadas por lavado de dinero.
Manzanares aseguró que el ex juez Claudio Oyarbide, que hace una década y en apenas cuatro meses terminó sobreseyendo al matrimonio Kirchner, “resolvió el sobreseimiento sin un papel respaldatorio, sólo con fotocopias de la información” que él mismo había presentado.
“Yo temía por el resultado de la pericia porque la documentación de algunos de los actos económicos no era suficientemente consistente desde el punto de vista legal”, expresó el ex contador.
Manzanares además se enfocó en las empresas familiares, Los Sauces y Hotesur, y explicó que antes de su muerte en octubre de 2010, “todo lo manejaba y decía Néstor Kirchner “.
Pero la estructura empresarial se modificó tras el fallecimiento del ex mandatario. Manzanares dijo que quien empezó a cumplir un rol protagónico en las empresas familiares fue su hijo Máximo.
Indicó que él hablaba permanentemente con el diputado nacional y que de él “recibía las órdenes sobre los montos a facturar en concepto de alquileres” y también lo relacionado con la empresa Hotesur.
Era el líder de La Cámpora quien “decidía y manejaba todo en las empresas “, reiteró su ex contador. Respecto a Florencia Kirchner, Manzanares sólo la mencionó como una integrante de las sociedades, pero dijo que ella “no decidía nada”.
“Máximo era quién decidía todo junto con Cristina Kirchner y el organizador era Sanfelice, quien respondía a estos dos últimos”, insistió.
Máximo Kirchner se encuentra procesado tanto en la causa Hotesur como Los Sauces por lavado de dinero, y en el caso de este último expediente también como parte de la asociación ilícita que supuestamente comandó CFK para blanquear fondos.