La defensa va a presentar recursos contra las declaraciones de los testigos debido a supuestas contradicciones.
Según confirmó Hugo Tomei, representante de los diez rugbiers imputados por el asesinato de Fernando Báez Sosa el pasado 18 de enero a la salida de un boliche de Villa Gesell, los jóvenes le expresaron su voluntad de declarar en la causa y están a la espera de que la fiscalía defina cuáles fueron los roles de cada uno durante el hecho.
Además, el abogado aseguró que va a presentar recursos contra las declaraciones de los testigos debido a supuestas contradicciones.
Por su parte, Tatiana, una testigo de 17 años, habló hoy con la prensa y se refirió a lo ocurrido luego de declarar ante la Justicia, mientras que aseguró que tiene «pánico de salir a la calle» por miedo a posibles represalias de los familiares de los rugbiers detenidos.
La joven afirmó que los arrestados por el crimen, luego de lo sucedido, «se limpiaban las manos y la ropa manchada de sangre, se fueron muy tranquilos, se cruzaron con policías pero no los retuvieron ni nada».
Los diez rugbiers continúan alojados en la Unidad Penal de Dolores en una celda con camas cuchetas y un único baño, separada del resto de la población carcelaria.
Los detenidos son Luciano Pertossi, de 18 años; Ayrton Viollaz, de 20; Matías Benicelli, de 20; Alejo Milanesi, de 20; Blas Cinalli, de 18; Juan Pedro Guarino, de 19; Máximo Thomsen, de 20; Enzo Comelli, de 19; Ciro Pertossi, de 19, y Lucas Pertossi, de 20.
