«Creamos un 0800 para que las personas puedan transmitir sus preocupaciones. También un área de infancias y adolescencia», dijo la Subsecretaria de Salud mental Julieta Calmens.
A siete meses de iniciada la cuarentena en la Argentina y en el marco del Día Mundial de la Salud Mental, la Subsecretaria de Salud Mental de la Provincia de Buenos Aires, Julieta Calmens, se refirió este viernes al impacto del confinamiento en los bonaerenses, y aseguró que las medidas de aislamiento «traen como consecuencia una afectación en la vida habitual y las relaciones sociales».
«Es un tema que venimos trabajando desde el comienzo de la pandemia. Estimábamos que (el aislamiento) iba a tener un impacto en la esfera de la salud mental como parte de nuestras vidas y nuestra salud, y lo fuimos confirmando a través el tiempo en distintos niveles», explicó la funcionaria en diálogo con Ventana Abierta, programa radial que se emite por FM Milenium, y sumó: «Estamos convencidos de que las medidas de aislamiento son de cuidado, pero traen también como consecuencia una afectación en la vida habitual y las relaciones sociales».
En ese sentido, Calmens consideró que «como en ningún otro momento de la historia ha quedado claro que necesitamos la relación con otros para nuestra salud mental», y explicó que la misma «no es solo un aspecto interior de la vida de cada uno, sino también una dimensión colectiva».
«La primer preocupación fue garantizar la continuidad de cuidados de aquellos que estaban en tratamiento. Creamos un 0800 para que las personas puedan llamar y transmitir sus preocupaciones, poder derivar a lugares de asistencia, y poder también hacer acompañamiento telefónico. Tenemos 8000 llamados. También un área de infancias y adolescencia. La creamos en el marco de la pandemia trabajando con el área de consultas y con el Ministerio de Educación, ayudando a los educadores a acompañar a los niños», explicó.
Además, y en relación al accionar de la Provincia de Buenos Aires para mitigar los efectos del confinamiento en la salud mental de los bonaerenses, aseguró que el territorio «tiene un despliegue muy importante» y que «los equipos de seguimiento de contactos estrechos también son una estrategia de cuidado». «Hacía falta un acompañamiento de salud mental ahí y se pudo incluir», reflexionó.
Respecto al rol del Estado, Calmens aseguró que «tiene mucha importancia» y que «va a depender mucho de como se desplieguen las estrategias de cuidado». «Hoy estamos trabajando con el Ministerio de Educación en visitar las casas de los chicos que están sin conexión para poder tener ahí también los recursos de salud mental para acompañar situaciones que no conocemos», completó.
Por último, la funcionaria aseguró que la orden de Axel Kicillof es «que este sea un Estado que asuma las responsabilidades en relación a los derechos, que no sea un Gobierno de funcionarios de escritorio», y cerró: «Los efectos van a depender de cómo procesemos colectivamente esto que vivimos. Hay que tratar de no estigmatizar con etiquetas algunos dolores y sufrimientos con los que estamos».
