Peritos caligráficos confirmaron que la letra no pertenecía al astro del fútbol y el cirujano, que quedó en la mira, podría sumar una nueva causa por falsificación de documento privado.
Se definió una de las primeras investigaciones al respecto de la muerte de Diego Armando Maradona y las irregularidades que se dieron en torno a su deceso y en esta oportunidad los peritos caligráficos concluyeron que la firma del «10» en papeles encontrados en poder del médico Leopoldo Luque no eran auténticas.
Los expertos de la Asesoría Pericial de San Isidro, quienes responden a Laura Capra, Cosme Iribarren, Patricio Ferrari, encabezados por John Broyad, determinaron que resultado final fue entregado en las últimas horas. Todo comenzó a partir del hallazgo en un cajón encontraron hojas donde se veían firmas de Maradona como si alguien las hubiese estado practicando.
En la documentación encontrada en allanamientos realizados en la casa del médico Leopoldo Luque se solicitaba a diferentes sanatorios historias clínicas del astro del fútbol en vida. En esta oportunidad, se analizó un texto dirigido a la Clínica Olivos en septiembre de 2020 por los antecedentes de Maradona.
El texto firmado rezaba: «De mi mayor consideración yo, Diego Armando Maradona, me dirijo a usted para solicitar entregue a mi médico personal Dr. Leopoldo Luque, copia de mi historia clínica. Desde ya, muchas gracias». Ante esto se dispuso la investigación con un resultado adverso para el médico que quedó en el centro de la escena y complica su situación.
«Las tres hojas fueron encontradas juntas, fue algo muy obvio, muy burdo. La pericia sólo confirma la sospecha que ya teníamos de que se trataba de una falsificación», explica uno de los investigadores a diferentes medios locales. Por esta acusación, el cirujano, que ya se encuentra investigado por la muerte del astro del fútbol mundial, podría sumar una acusación por falsificación de documento privado.