Fue durante la inauguración de obras de AySA en la Provincia, a un día de haber alcanzado las 100 mil muertes por Covid-19
El presidente de la Nación, Alberto Fernández, se pronunció este jueves en contra de la oposición después de haber alcanzado las 100 mil muertes por coronavirus y expresó: «Para nosotros la muerte no es intrascendente, pero tampoco un negocio». Fue durante la inauguración de obras de AySA en la provincia de Buenos Aires.
«No tiene sentido lucrar con la muerte, la muerte nos duele a todos, nadie celebra la muerte salvo los asesinos, y nosotros no lo somos y los argentinos no lo son», expresó el mandatario por las críticas a su gestión durante la pandemia, provenientes del lado opositor. «Sólo espero que tanto dolor y padecimiento no sea en vano y que este mal momento no nos quite lo que vivimos en otros tiempos, porque a nosotros nos apenaría mucho que el pasado vuelva», lanzó el jefe de Estado en el acto en referencia a una eventual vuelta de la oposición al gobierno.
En relación a la cifra de fallecimientos alcanzada, Alberto Fernández aseguró: “Para nosotros no es intrascendente pero tampoco es un negocio, porque hay quienes negocian con esas muertes. El negocio de dividirnos, el negocio de ponernos en veredas enfrentadas”. Y agregó que «no necesitamos sumar muertos para sufrir». Señaló, también, que nos encontramos frente a «cinco días de duelo» porque los fallecidos «merecen homenaje y reconocimiento».
Por su parte, el ex jefe de Estado Mauricio Macri le remarcó al gobierno que «al final tenemos 10% más de pobres y 100 mil muertes por coronavirus». En este contexto, y a partir de las 614 muertes y los 19.697 contagios registrados el miércoles, Macri acusó a Alberto Fernández de «no comprar vacunas a Estados Unidos por un tema ideológico» y que debido a eso, «no se evitaron miles de muertes».
En el ida y vuelta, el presidente recordó que «sectores de la oposición asustaron a muchos argentinos» con respecto a las vacunas, mientras que desde el gobierno buscaron que «nadie temiera y todos estuvieran convencidos de que vacunarse es la solución».
