El mandatario electo recibió al joven estigmatizado durante las elecciones.
Braian Gallo fue el blanco de una ola de críticas y comentarios discriminatorios en las redes sociales luego de que una persona viralizara una imagen suya mientras se desempeñaba como presidente de mesa durante las elecciones del domingo pasado. El presidente electo, Alberto Fernández, fue uno de los primeros políticos en manifestarle su apoyo en su cuenta de Twitter y un día después se reunió con el joven.
Junto a su mamá y su hija se dirigieron este miércoles hasta la oficina que Fernández tiene en la calle México al 300. Allí se sacaron una foto como modo de rechazar la estigmatización sufrida.
Braian vive en Moreno, trabaja en una cooperativa que limpia arroyos en la provincia de Buenos Aires y ayuda como voluntario en el Club de Fútbol Casa 2000.
El futuro sucesor de Mauricio Macri ya se había pronunciado el martes tras conocer la historia de Gallo: “El país que se viene va a dejar atrás los prejuicios y la discriminación. Todos somos Braian”, tuiteó.
El lunes, en diálogo con TN, el joven contó la discriminación que sufrió desde el domingo: “Mientras estaba en el colegio vinieron a mostrarme una captura de pantalla de cómo me habían escrachado. En ese momento no le di bola, pero cuando llegué a mi casa, tipo 10 de la noche, habían colapsado las redes con eso. Mucha gente me atacó y otra me defendió”.
“Hay gente que se viste de traje y corbata, pero son los más chorros de la Argentina. Nosotros somos humildes. Laburamos todos los días”, se descargó.