“No hubo ningún tipo de preguntas ni nada”, se quejaron Leonardo y Laura, quienes arribaron a Ezeiza el lunes pasado.
Mientras el brote de coronavirus se extiende en el mundo y aumenta la preocupación, Leonardo Crespo y su hermana Laura, dos argentinos que viven en China, volvieron anticipadamente del país asiático. Llegaron a Ezeiza el lunes a la noche y se sorprendieron por la falta de controles.
“Llegamos al aeropuerto y fue simplemente pasar. No hubo ningún tipo de preguntas ni nada”, precisó Leonardo al diario La Capital de Mar del Plata y agregó: “Había un cartel que decía Coronavirus y recién en las últimas horas pusieron una persona, sin guantes ni ningún tipo de protección”.
Ninguno presenta síntomas ni fiebre pero igual decidieron alquilar un departamento en la Ciudad de Buenos Aires y ponerse en cuarentena. “Tratamos de aislarnos y solo hemos salido una vez a comprar comida. Tenemos barbijos porque compramos allá. Acá no hay”, aclararon.
Crespo, abogado que hizo una maestría en comercio internacional en la Universidad de Nankaid, exigió más controles en los aeropuertos. “No queremos generar pánico pero sí que se tome conciencia de la magnitud. Hay cosas que se pueden hacer. Nos sorprendió que acá no haya ningún tipo de control mientras en el resto del mundo hay hace tiempo“, declaró.
Leonardo trabajaba en una empresa en Foshan, pero pasó los días de aislamiento en Tianjin, donde viajó para pasar Año Nuevo. Allí se encontraban cuando empezó la epidemia. “Unos días antes del Año Nuevo Chino se comentó que había un virus nuevo. Después se tomaron medidas drásticas como suspender todas las actividades públicas, cerrar los parques. La recomendación era que la gente esté en las casas y sólo salga cuando sea necesario, Por supuesto, el uso de máscaras era obligatorio”, contó el joven.