Después de un partido con muchos altibajos emocionales, la “Scaloneta” se impuso en los penales 4 a 2 y se coronó en Qatar.
Un primer tiempo brillante del seleccionado nacional, no alcanzó para darle el Mundial a la “Scaloneta”, que tuvo que sufrir y ponerse el overol para sacar adelante la final y bordar la tercera estrella al escudo.
Si bien mucho se discutirá el penal sancionado sobre Di Maria, a Messi poco le importó y con mucha templanza cambió falta por gol.
Con el 1-0, la “Scaloneta” justificó con creces su ventaja en el marcador. Movimiento de pelota, juntando pases y gambetas, fue lo que descolocó a “Les Blues”. Y en un desconcierto de la defensa francesa, Argentina utilizó otra de sus armas letales como lo es el contraataque para dejar sólo a Di María tras un pase de Mac Allister y que el “Fideo”, el de los goles importantes, sentencie el 2-0 parcial a los 36’.
Después del segundo gol, Argentina manejó más los tiempos, ante una Francia que se vió completamente agobiada, tanto que Deschamps cambió a dos piezas claves de su equipo como lo son Dembelé y Giroud.
Pero para desgracia argentina y el sufrimiento de un pueblo, Mbappe sacó dos goles de la galera y llevó el partido al alargue.
En 30’ llenos de tensión, los dos equipos dejaron todo, un gran alargue de Lautaro Martinez le dió situaciones de gol a Argentina y Messi capturó un rebote para poner el 3-2 que parecía definitivo.
Pero todavía quedaba tiempo para otro penal de Mbappe, en el cual llevaría la definición a los doce pasos.
Y allí el “Dibu” es un experto, pese a que en el tiempo regular, no pudo contra el crack luso, otra vez se volvió a lucir. Emiliano Damian Martinez fue el héroe, un penal tapado a Koman y otro desviado por Tchuameni le terminaron dando la copa a Argentina.