El Xeneize ya ganó su cuarto torneo de esta copa federal, es el que más trofeos alzó y ratificó su mote de máximo ganador del país.
Boca Juniors cumplió con su objetivo, eliminó a Talleres de Córdoba 5 a 4 por penales tras empatar 0-0 en el tiempo reglamentario y celebró la cuarta Copa Argentina de su historia en el Estadio Único Madre de Ciudades de Santiago del Estero. De esta manera clasificó directo a la fase de grupos de la Copa Libertadores.
En la definición por penales anotaron para el elenco de La Ribera Marcos Rojo, Carlos Izquierdoz, Cristian Pavón, Agustín Sández y Eduardo Salvio.
Para Talleres convirtieron Mateo Retegui, Juan Ignacio Méndez, Enzo Díaz y Michael Santos.
El partido en rasgos generales fue muy parejo, ninguno pudo sacarse ventajas serias, ni dominar las acciones por completo. En los penales, Rossi se convirtió en héroe de nuevo y Salvio, que se recuperó hace poco de una rotura de ligamentos en la rodilla y entró sólo para la ejecución, la clavó en el ángulo para hacer festejar a todos los hinchas «xeneizes».
El título, primero de Sebastián Battaglia como entrenador mientras se pone jaque su continuidad, le permite a Boca clasificar directamente a la fase de grupo de la Copa Libertadores, cuando por la tabla anual iba a tener que jugar el repechaje probablemente.
Boca Juniors obtuvo su 49° título oficial de máxima categoría a nivel nacional y se pone a uno de River Plate que tiene 50, en la tabla de Títulos Locales (sumando Torneos de Liga y Copas Nacionales) y continúa a sólo tres escalones en cuanto a Ligas (36-34).
