Respecto a impuestos, se reestructurarán las escalas del ABL y Patentes para lograr mayor progresividad.
La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires aprobó este jueves el presupuesto 2025, que prioriza la inversión en Educación y Seguridad, ejes centrales de la gestión. El plan contempla un gasto total con equilibrio fiscal, déficit cero y un bajo nivel de endeudamiento, permitiendo una mayor inversión en infraestructura.
El 16,5% del presupuesto estará destinado a Seguridad, siendo la mayor asignación de la historia. Este rubro incluirá la adquisición de patrulleros, pistolas taser y byrna, videovigilancia, más policías en las calles, nuevos Puntos Seguros y la finalización de obras en el centro penitenciario de Marcos Paz. Además, se avanzará en la transferencia del Servicio Penitenciario para resolver la problemática de los presos en dependencias locales.
Con una inversión estimada en $2 billones 795 mil millones, Educación será el área con mayor participación presupuestaria. Los recursos se destinarán a mejoras edilicias, incorporación de tecnologías, y la creación de centros TUMO. También se implementará el plan “Buenos Aires Aprende” para adaptar el sistema educativo a nuevos desafíos.
El gasto en obra pública representará el 19,3% del presupuesto, con foco en movilidad urbana y revitalización del sur de la ciudad. Entre los proyectos, destacan la renovación de vagones y estaciones de la línea B de subtes, la puesta en marcha del Trambus, nuevas líneas de colectivos eléctricos, y la renovación de la autopista Dellepiane. También se busca reactivar el Parque de la Ciudad y revitalizar el Autódromo.
El 61,9% del gasto total estará destinado a Educación, Salud y Promoción Social. Respecto a impuestos, se reestructurarán las escalas del ABL y Patentes para lograr mayor progresividad, con actualizaciones diferenciadas según las zonas y medidas específicas para atenuar los incrementos en viviendas y vehículos. Además, más jubilados podrán acceder a exenciones.
El Gobierno porteño continuará el reclamo ante la Corte Suprema por la restitución del coeficiente de coparticipación del 3,5%, reducido en 2020.
Este presupuesto marca una apuesta por el desarrollo integral de la Ciudad, con obras, seguridad y educación como pilares fundamentales para el 2025.