El jurista propuesto por Mauricio Macri para el máximo tribunal tratará de llevar adelante una gestión menos personalista que su antecesor.
Carlos Rosenkrantz asume este lunes la presidencia de la Corte Suprema de Justicia tras haberle ganado la votación interna al saliente Ricardo Lorenzetti.
Rosenkrantz, hijo de padre judío y madre católica, cumplirá a fines de octubre 60 años e imprimirá a su gestión un rol menos personalista que su antecesor.
El jurista llegó a ese puesto tras la propuesta del presidente Mauricio Macri, quien en una de sus primeras medidas de Gobierno nombró a él y a Horacio Rosatti por decreto. Tras una gran polémica por la implementación, el jefe de Estado dio marcha atrás y cumplió con el paso por el Senado.
Para que obtenga la presidencia fue fundamental el apoyo de Elena Highton de Nolasco, una de sus compañeras de tribunal, quien seguirá ocupando la vicepresidencia del cuerpo.
“La Corte es un órgano colegiado, toma sus decisiones por mayoría, nadie tiene doble voto. Cada tres años se elige presidente y eso es lo que pasó. El presidente de la Corte debe interpretar una partitura hacia afuera, que está dada por la función de representación del cuerpo, pero lo que realmente importa son los fallos y allí el presidente tiene un solo voto como los demás. En esta Corte nunca se va a ver una mayoría automática en nada”, resaltó Rosatti a la Voz del Interior