Sergio Mattarella le aconsejó a su par argentino Mauricio Macri que rompa el contrato con la firma que lleva a cabo la construcción, para que las causas de corrupción no perjudiquen a la compañía italiana Ghella.
Así lo advirtió el ministro de Justicia, Germán Garavano, en caso de que la empresa brasileña no se acoja a la figura del arrepentido para nombrar a los argentinos implicados en sobornos.