La defensa de la vicepresidenta planteó en la apelación que si bien la ley «hablita a la Cámara de Casación a dictar sus pronunciamientos con el voto concurrente de dos de sus jueces» la norma es de «dudosa constitucionalidad».
La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner apeló este lunes a los fallos de la Cámara Federal de Casación Penal que revocó los sobreseimientos y ordenó la realización de juicios orales a los imputados de las causas Hotesur-Los Sauces y el Memorándum de entendimiento con Irán.
La defensa de la titular del Senado baso su argumento en la ausencia de la jueza Ana María Figueroa en la decisión de Casación, apartada de su cargo por la Corte Suprema tras cumplir los 75 años, edad máxima establecida por la ley para poder ejercer su función.
«A tal efecto la Sala que dictó el fallo quedó indebidamente constituida sólo por dos jueces, habiendo sido excluida de la resolución del caso la tercera magistrada (Ana María Figueroa) a través de una decisión de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que no registra antecedentes similares y que resulta contraria a la práctica seguida con relación a otros magistrados que se encontraban en idéntica situación a la de la jueza Figueroa», expusieron los abogados Alberto Beraldi y Ary Llernovoy.
Si bien los letrados reconocieron que la ley «hablita a la Cámara Federal de Casación Penal a dictar sus pronunciamientos con el voto concurrente de dos de sus jueces», advirtieron que la norma es de «dudosa constitucionalidad».
«No les acuerda una prerrogativa discrecional a los magistrados para acotar el marco de deliberación y excluir del debate a un tercer juez que, según la ley y los reglamentos dictados en consecuencia, también debe discutir con sus colegas e intercambiar opiniones para luego dictar sentencia», precisaron.
Mientras tanto la hija de la vicepresidenta, Florencia Kirchner, quedó excluida de la causa de manera definitiva luego de la Fiscalía de Casación no apelara por su inclusión.
