La ex mandataria aseguró que el “único objetivo” es “colocar a una ex presidenta opositora a este gobierno en el banquillo de los acusados en plena campaña presidencial”. Está acusada de presuntas irregularidades en la obra pública durante su gestión.
A horas del comienzo del primer juicio por corrupción en su contra, la ex presidenta Cristina Kirchner confirmó que asistirá a Comodoro Py, aunque aseguró que se trata de “un nuevo acto de persecución” en “plena campaña presidencial”.
La ex mandataria llega a juicio procesada como jefa de una asociación ilícita que favoreció a Lázaro Báez con los contratos de la obra pública en Santa Cruz entre 2004 y 2015 por $ 46 mil millones, por lo que el empresario también será juzgado.
«En unas horas comenzará en Comodoro Py un juicio oral al que jamás debí haber sido citada. Se trata de un nuevo acto de persecución con un único objetivo: colocar a una ex presidenta opositora a este gobierno en el banquillo de los acusados en plena campaña presidencial», sostuvo la líder de Unidad Ciudadana en su cuenta de Twitter.
Y continuó, con un claro mensaje contra el fiscal Carlos Stornelli: «Igualmente, una vez más y como siempre lo he hecho, volveré a ir. Sí, pese a todo volveré a ir. No como otros, que desde Comodoro Py acusan y piden detenciones a mansalva y cuando los pescan infraganti no respetan las citaciones judiciales porque dicen que no tienen garantías».
Sobre la causa, CFK señaló: «Se trata de una denuncia efectuada por el Gobierno de Mauricio Macri sobre obras públicas viales llevadas a cabo enteramente en Santa Cruz. No se trata de una denuncia original sino de un refrito de denuncias desde el año 2008, armadas por diputados de la Coalición Civica, en las cuales Comodoro Py se declaró incompetente en el año 2011 y la justicia de Santa Cruz las sobreseyó por inexistencia de delito».
En unas horas comenzará en Comodoro Py un juicio oral al que jamás debí haber sido citada. Se trata de un nuevo acto de persecución con un único objetivo: colocar a una ex presidenta opositora a este gobierno en el banquillo de los acusados en plena campaña presidencial.
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) May 21, 2019
«Jamás tomé intervención alguna en los expedientes administrativos que se realizaron por cada una de estas obras. Entre la Presidencia de la Nación y las obras denunciadas existen doce instancias administrativas de carácter nacional y provincial. Las `pruebas´ por las que fui acusada son las leyes nacionales de presupuesto aprobadas por ambas cámaras del Congreso de la Nación, los DNU de ajustes presupuestarios de toda la Administración Pública Nacional y las Decisiones Administrativas dictadas por los jefes de Gabinete», se defendió la ex mandataria.
Y concluyó: «Claramente no se trata de hacer justicia. Sólo armar una nueva cortina de humo que pretende distraer a los argentinos y las argentinas -cada vez con menos éxito- de la dramática situación que vive nuestro país y nuestro pueblo».
Cristina Kirchner está acusada de presuntas irregularidades en la obra pública durante su gestión, junto con otros 16 imputados: en el expediente también están involucrados el dueño de Austral Construcciones, Lázaro Báez; el ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido; el ex secretario de Obras Públicas José López; y Carlos Kirchner, primo del fallecido ex presidente Néstor Kirchner.
El juicio será llevado adelante por el Tribunal Oral Federal 2, integrado por los jueces Jorge Gorini, Andrés Basso y Rodrigo Giménez Uriburu, mientras que como suplente estará la magistrada Adriana Pallioti.