Bonadio la señala como jefa de una banda organizada. También pidió su desafuero. De Vido, Baratta y varios empresarios también están acusados.
El juez federal Claudio Bonadio procesó con prisión preventiva a la ex presidenta Cristina Kirchner por considerarla jefa de una asociación ilícita en la causa por supuestos pagos de coimas de empresarios a ex funcionarios por la obra pública durante su mandato.
El magistrado volvió a pedir el desafuero de Cristina Kirchner al Senado de la Nación y procesó también a ex funcionarios y empresarios.
Hasta el momento, la causa tiene una veintena de imputados colaboradores, otros tantos detenidos y un prófugo. Entre los arrepentidos se encuentra Oscar Centeno, chofer del ex funcionario del Ministerio de Planificación Federal Roberto Baratta, así como empresarios y ex integrantes de la gestión de Cristina Kirchner.
En su momento, el juez había informado que el expediente acumulaba “32 cuerpos de actuaciones y voluminosa documentación”, al tiempo que se realizaron “70 allanamientos” y secuestraron unos 6 millones de pesos y poco más de un millón de dólares.
Bonadio tomó indagatoria a 52 personas y dispuso 26 detenciones, de las cuales liberó a un total de 11: además, 17 imputados declararon en calidad de “arrepentidos” y se resolvieron “15 acuerdos de homologación en forma positiva”.
El magistrado afirmó en su último escrito que “los fondos recaudados” por las presuntas coimas llegaban finalmente “a manos de los verdaderos beneficiarios de la maniobra ilícita: Néstor Kirchner, Cristina Fernández y Julio De Vido.