El economista Carlos Melconian no escatimó críticas hacia las medidas gubernamentales, manifestando contundentemente que «está claro que se armó sobre la marcha».
Melconian, reconocido en el ámbito económico, analizó de manera crítica el plan presentado por Luis Caputo, destacando que «se armó sobre la marcha» y resaltando que «canjearon la motosierra por la licuadora».
En su detallado análisis, el ex candidato a ministro de economía por Juntos por el Cambio describió el plan como un «ajuste ortodoxo clásico». Aunque busca el equilibrio fiscal, plantea interrogantes sobre la inflación y la duración de la recesión. Subrayó: «La pregunta central de lo anunciado hasta acá es hasta dónde llega la inflación, hasta dónde la recesión».
Adicionalmente, expresó su preocupación por el formato y la improvisación percibidos en la implementación del plan, indicando que «dado el nivel de improvisación, cómo se llenaron los casilleros, está claro que se armó sobre la marcha». Concluyó advirtiendo sobre los posibles costos de estas decisiones, enfatizando que «no debe ni estar pensado cómo sigue».
En declaraciones radiales, Melconian compartió su perspectiva: «Creo que ayer se anunció un pedacito, más allá del susto porque la herencia es muy mala. Creo que no se ha cortado con el actual régimen cambiario. El Banco Central se va a involucrar en la deuda importadora y mucho menos en el tema de Leliq. Ahí se metieron en un lío sin necesidad, porque no va a pasar nada».
Sobre la posibilidad de una modificación hacia la dolarización en lugar de la bimonetariedad, expresó: «No sé si vendrá una modificación para trocar bimonetariedad por dolarización; anoche salió un comunicado del Banco Central para recuperar la demanda del peso».
El economista confesó su inquietud sobre la inflación, anticipando que «va a venir por arriba de lo que me imaginaba. No imaginaba este saque cambiario».
Enfatizó la necesidad de una estrategia y un programa, advirtiendo sobre la falta de claridad: «Tiene que haber una estrategia, un programa. Sin pasarse de rosca vendiendo espejitos de colores, creo que faltó mostrar una luz al final del túnel, de la estrategia y el programa. Que hay un cerebro detrás de esto. Lo comunicacional sin contenido es cháchara, el contenido sin comunicación es incertidumbre».