El organismo dio un nuevo respaldo al país en su intento de renegociación, pero advirtió que aún queda margen de mejora.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) dio este lunes un nuevo respaldo a la Argentina en su intento de renegociar la deuda con los acreedores privados, al considerar que la última oferta realizada por el Ministerio de Economía es “sostenible”, aunque aún queda margen para mejorarla.
«La propuesta revisada de reestructuración de la deuda de las autoridades del 26 de mayo sería consistente con el restablecimiento de la sostenibilidad de la deuda con alta probabilidad”, destacó el organismo mediante un comunicado, y agregó: “El análisis también sugiere que existe solo un margen limitado para incrementar los pagos a los acreedores privados y al mismo tiempo cumplir con los umbrales de deuda y servicio de la deuda y otras condiciones establecidas en la Nota Técnica de marzo”.
Además, el Fondo Monetario evaluó positivamente la oferta que el ministro de Economía Martín Guzmán acercó a los bonistas el pasado 26 de mayo, a través de la cual, y fruto de las conversaciones con acreedores, el Poder Ejecutivo redujo el periodo de gracia sin pagos a seis meses – es decir, volvería a pagar deuda a partir de mayo de 2022-, recortó la duración de ocho bonos ofrecidos y elevó los cupones (intereses) de los títulos a emitir.
Con esta nueva propuesta, el organismo sostuvo que la Argentina llegó cerca del límite de lo que sería considerado “sostenible”.
Además, días atrás los tres grupos de acreedores realizaron su contrapropuesta, donde en respuesta a la oferta argentina que implica un valor presente neto, a una tasa de recupero del 10%, de unos 47 dólares por cada 100 nominales -es decir, una quita de 53 dólares- sugieren entre 53 y 58 dolares por cada 100, de acuerdo a distintas estimaciones privadas.
Para el FMI, la oferta argentina no puede ir más allá del 50%. Es decir, podría estirarse unos tres dólares más.
Cabe destacar que el próximo 2 de junio vencerá el plazo formal para que los acreedores acepten la primera oferta realizada por el país, que en su momento contó con una aceptación inferior al 20%. Más allá de esto, la cartera que dirige Martín Guzmán ampliará esa ventana de tiempo e ingresará la nueva presentación, marcando el día 10 de junio como el nuevo plazo.
Los negociadores argentinos consideran que las posiciones de los acreedores no están unificadas y eso dificulta llegar a un acuerdo con todos. Por eso apelaron al paraguas “elegante” del Fondo, que afirma que no interviene en las negociaciones pero, al mismo tiempo, valora de manera positiva la oferta argentina.
