Brasil reportó un récord de muertes. En Europa empiezan a relajar las cuarentenas. Trump se enredó en un debate con científicos y con fabricantes de desinfectantes.
La capacidad de Donald Trump para generar polémicas parece infinita. El presidente de Estados Unidos ha sugerido la posibilidad de tratar el coronavirus con “una inyección” de “desinfectante” o aplicando “luz solar” en el cuerpo humano para poder así vencer a la covid-19, la enfermedad generada por el virus.
“Veo que el desinfectante lo noquea en un minuto, en un minuto. ¿Hay alguna manera de que podamos hacer algo como una inyección dentro o casi una limpieza? Como pueden ver, llega a los pulmones y alcanza una cifra tremenda en los pulmones, por lo que sería interesante comprobar eso”, afirmó el mandatario estadounidense, dirigiéndose al director de la División de Tecnología y Ciencia del Departamento de Seguridad Nacional, Bill Bryan.
Más tarde, y ante la oleada de críticas y burlas, y hasta de una respuesta de fabricantes de desinfectante, dijo que lo había dicho de manera “sarcástica”.
Entre las respuestas al comentario de Trump se cuenta el de la compañía Reckitt Benckiser, responsable del desinfectante Lysol, uno de los más empleados en Estados Unidos. Publicó un comunicado en el que dice que el producto no está hecho para el consumo humano y “que bajo ningún concepto nuestros desinfectantes deben administrarse en el cuerpo humano (a través de la inyección, ingestión o cualquier otra vía)”.
Estados Unidos, que superó los 50.000 muertos por coronavirus, está en el pico de la pandemia, mientras España e Italia, entre otros países de Europa, mostraron cifras alentadoras que permiten vislumbrar algunos acuerdos sectoriales para relajar los confinamientos, que llevan más de 35 días.
Brasil también fue noticia ayer por las 357 nuevas muertes por coronavirus, con lo cual el número de fallecidos llegó a 3.670, mientras la cifra de casos ascendió a 52.995, según el Ministerio de Salud. La cifra de decesos aumentó un 10,8% en 24 horas y en los últimos siete días murieron en Brasil por coronavirus 1.323 personas.
Las malas nuevas se fueron conociendo durante una jornada cargada de tensiones por la renuncia del ministro de Justicia, el ex juez Sérgio Moro, célebre por perseguir judicialmente al ex presidente Luiz Lula da Silva y últimamente enfrentado con el actual mandatario, Jair Bolsonaro.
A menos nueve estados están flexibilizando el aislamiento social por presión del gobierno federal y de las asociaciones de comerciantes. El estado de San Pablo, el más poblado del país con 46 millones de habitantes y el que aporta un tercio de la economía brasileña, es el más castigado por la pandemia.
En España, en tanto, superada la peor parte de la crisis del coronavirus, que causó la muerte a más de 22.500 personas -367 en las últimas 24 horas-, el país se encamina hacia un una desescalada del confinamiento en que se encuentran sus 47 millones de habitantes desde el 14 de marzo último.
Con ese objetivo, el gobierno español busca consensuar criterios con autoridades regionales para poner en marcha una “desescalada asimétrica”, entre los que figura que los contagios sean menos del 1% y que esté libre el 50% de camas en Unidades de Cuidados Intensivos para coronavirus.
La estrategia se apoyará en un estudio que medirá el nivel de inmunida de la población frente al virus.
Italia tuvo un jornada alentadora ya que registró el quinto día consecutivo de descenso en cantidad de personas con pruebas positivas, al tiempo que confirmó menos pacientes internados y en terapia intensiva. Pero la muerte de 420 personas un día certifica la dificultad para perforar el piso de 400 fallecimientos diarios desde mediados de marzo.
Desde el inicio de la pandemia, un total de 25.969 personas fallecieron en todo el país, con 13.106 concentrados en la región norteña de Lombardía.
En cambio, en el Reino Unido el número de nuevas muertes por el virus sigue siendo alto: entre el jueves y ayer hubo 684, lo que lleva la cifra total por la pandemia a 19.506.