El presidente de la Nación solicitó en una cumbre del G20 un acceso más “equitativo” para las dosis contra el coronavirus. Además, advirtió por el “impacto negativo desproporcionado en los países en desarrollo”.
Poco después de los anuncios de restricciones por el coronavirus, Alberto Fernández tuvo una reunión con los líderes del G20 en la Cumbre Mundial de la Salud donde volvió a mencionar por un acceso “equitativo y solidario” a las vacunas contra el coronavirus para controlar la pandemia.
“Es fundamental garantizar el acceso equitativo y solidario a vacunas y medicamentos. La grave desigualdad en el acceso a medicamentos y vacunas representa un hecho injusto, sumamente inmoral y contrario a los intereses de la comunidad internacional en su conjunto”, resaltó el presidente argentino.
Desde Olivos, el jefe de Estado remarcó que el acceso igualitario a las vacunas “debe ser una prioridad para los Estados, ya que resulta una condición necesaria para superar esta pandemia y favorecer el efectivo goce del derecho a la salud”.
Además, advirtió que hay “un impacto negativo desproporcionado en los países en desarrollo y en las poblaciones más vulnerables” de las “graves consecuencias sanitarias, económicas y sociales” que provocó la pandemia.
“Los logros científicos sin precedentes que se han alcanzado beneficien a todos”, destacó Fernández que pidió por “revisar y actualizar la arquitectura sanitaria mundial de modo que permita compartir conocimientos, realizar investigaciones conjuntas y promover la participación de los países en desarrollo en las redes científicas internacionales”.
“Rediseñar el sistema global de gobernanza sanitaria es el punto de partida. Apoyo la adopción de nuevas herramientas y estrategias animadas a favorecer la preparación y respuesta a emergencias sobre la base de la solidaridad y cooperación internacionales”, cerró el mandatario.