Pero sí comentó que a su padre le tuvo que aclarar los rumores sobre su sexualidad. “Me pasó que se lo conté a mi viejo, porque entiendo y entendía que mi papá seguía en el pueblo, veía a sus amigos, trabajaba en el campo y entiendo que esa versión pudo haberle afectado, aunque jamás me hubiese dicho algo. Un día estábamos pescando y se lo dije”.
En el mismo contexto, Fantino hizo una revelación: “Me arrepiento de una cosa que me pudo haber costado la carrera, porque en ese momento relataba fútbol y recién en la cancha nueva de San Lorenzo me gritaban -puto, puto, puto- me gritaban, Bastía, Luciano Pereyra. Yo en ese momento estaba con Nahuel (su hijo) y los cité a los tipos y se quedaron esperando y me re cagué a trompadas en el estacionamiento de manera violenta”.