Más allá de la euforia de las primeras horas, desde Cambiemos van a seguir voto a voto el desenlace del escrutinio entre Bullrich y Cristina. Y volverán a insistir con la boleta electrónica.
El clima festivo. La música. La vuelta de los globos no dependía sólo de la definición voto a voto de la provincia de Buenos Aires, en las que la rival era Cristina. Primer dato contundente de las urnas: Cambiemos se consolidó como la fuerza política con mayor cantidad de votantes. Y subió los porcentajes respecto del 2015 en muchísimos distritos clave.
Es sabido que la provincia de Buenos Aires es «la madre de todas las batallas» y por eso el recuento de votos será minucioso y meticuloso. Una situación parecida en octubre, significaría una banca más o menos en el Senado, donde particularmente puede hacer más fuerte Cambiemos luego de estas elecciones de medio término.
Con el 95,68% de las mesas escrutadas se dio por terminado el escrutinio provisorio para esperar los resultados del definitivo, que se pondrá en marcha esta semana, cuando se constaten los datos de las mesas que quedaron sin escrutar. El resultado parcial: 34.19% para Esteban Bullrich y 34.11% para Cristina Kirchner.
Hay aún un 4% de urnas sin escrutar. Hay que constatar 1031 actas circunstanciales, que son aquellas que no llegan, y que suelen no llegar porque los presidentes de mesa colocan el telegrama dentro de la urna. También hay 619 casos de telegramas que llegan con errores. El más frecuente es encontrar que los resultados de la mesa y la cantidad de votantes no coinciden. Esto se define en la Cámara Electoral y se las denomina “incidencias definitivas”.
Además, hay 38.000 votos que son votos recurridos o votos de comando, que también van directamente al escrutinio definitivo. Es decir, el resultado se va a definir recién con esos números porque apenas hay 6915 votos de diferencia entre el candidato del oficialismo y la ex presidenta.
Desde el Gobierno se va a insistir con volver a debatir sobre la Boleta Única Electrónica, proyecto que fue aprobado en Diputados pero rechazado en Senadores y que tiene como objetivo terminar con las colectoras y terminar con las candidaturas múltiples.