Así lo advirtió el ministro de Justicia, Germán Garavano, en caso de que la empresa brasileña no se acoja a la figura del arrepentido para nombrar a los argentinos implicados en sobornos.
Mientras el Gobierno negocia un acuerdo de cooperación con la constructora Odebrecht, que reconoció que destinó USD35 millones en sobornos al país para asegurarse contratos de obra pública, Germán Garavano instaló que podrían rescindir los contratos de obras «si la compañía no aporta la información requerida sobre los argentinos involucrados».
«Si no contribuye con la información es una posibilidad cierta –que se le corten los contratos– como ocurrió en otros países como en Perú», dijo el ministro de Justicia de la Nación.
«El presidente me ordenó tratar de conseguir la información completa lo antes posible. Vimos que desde el Ministerio Público Fiscal no se registraron avances y en función de eso convocamos a la empresa», agregó.
Ayer, el fiscal Federico Delgado le notificó a los directivos de la constructora que «tienen un plazo de cinco días para aceptar o no la figura del arrepentido».
