El intendente K fue sincero con su gestión. Los últimos dos casos conmovieron al país: Un niño de 3 años fue asesinado de un balazo cuando caminaba con su papá, y una pareja de jubilados falleció cuando sus secuestradores chocaron contra un árbol.
Lomas de Zamora es una de las zonas más calientes del delito en la provincia y dos hechos recientes lo sostienen. La semana pasada, un niño de 3 años fue asesinado de un balazo cuando iba a comprar una pizza con su papá. Y este fin de semana murió una pareja de jubilados cuando sus secuestradores chocaron contra un árbol.
Durante la manifestación de vecinos en una comisaría, insultaron al intendente, Martín Insaurralde, quien este lunes hizo su descargo: «¿Te pensás que no me duele? La gente que me putea tiene un dolor enorme y tiene razón».
El jefe comunal aseguró que «siente la misma bronca que los vecinos cuando escucha el reclamo de que el patrullero no pasa o cuando se entera de otras irregularidades». «Llegó el momento de dejar la política de lado y conformar un gran acuerdo entre todas las fuerzas para abordar una de las principales problemáticas», señaló.