El mandatario se metió en el debate por la interna del PJ en el que Cristina Kirchner y Ricardo Quintela se disputarán la presidencia.
Javier Milei fue consultado este domingo por la interna del Partido Justicialista. El Presidente evitó explayarse al sostener que es «un problema de la oposición«, pero dejó una fuerte frase. «Hay una parte de morbo, que me gustaría meterle el último clavo al cajón del kirchnerismo con Cristina adentro«, lanzó sobre la expresidenta Kirchner, que disputa el partido con el gobernador Ricardo Quintela, de La Rioja, mientras alimenta tensiones con el bonaerense Axel Kicillof.
Así y todo, Milei minimizó su interés en la interna peronista. «No es un problema para mí, es un problema de la oposición», descartó el tópico. Aunque dejó mensajes para peronistas.
«Los que, por ejemplo, estaban comiendo pochoclo esperando que nos cayéramos en abril deben estar gordos, con sobrepeso. Espero que tengan reservas para seguir comiendo pochoclos», ironizó el Presidente, recordando los dichos de Enrique Albistur, esposo de la diputada y ex ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz.
«Al margen de las humoradas, estamos convencidos de estar haciendo el mejor gobierno de la historia», se ufanó Milei para destacar sus variables económicas.
También, la siempre sinuosa relación con su vice fue parte del temario. «Yo no lo hubiera hecho«, contestó el Presidente al ser consultado por el acto con inauguración de busto en el Senado que Victoria Villarruel le dedicó como homenaje a Isabel Perón.
«Para mí, el caso de la señora María Estela Martínez de Perón no realza a las mujeres, todo lo contrario. No creo que haya llegado a ese lugar por sus méritos intelectuales, profesionales…», se diferenció Milei.
Al continuar su crítica recordó que las características de aquella administración de la viuda de Perón derivaron en el Rodrigazo «que implicó sextuplicar la tasa de inflación y quintuplicar la cantidad de pobres».
«Me parece que no es un modelo a seguir y tampoco me parece razonable hacer una reivindicación de alguien que creó la Triple A y que además durante su gobierno se firmó el decreto de aniquilamiento», añadió, en un claro contraste con Villarruel.
Sobre el final de la respuesta, el jefe de Estado insistió que él no hubiera accionado de la misma manera que la titular del Senado pero enmarcó la diferencia en un slogan libertario: «No somos manada».
«Ella tiene una visión de las cosas y yo no comparto. Si ella quiere poner un busto de María Estela Martínez de Perón en el Senado, bueno, es la casa de ella. En la mía no la va a encontrar seguro«, remarcó Milei.