El gobernador sufrió una lipotimia que conlleva una pérdida súbita de conciencia. Luego de unos minutos, pidió disculpas y aclaró que “no es la primera vez que me pasa”.
El gobernador de Córdoba Juan Schiaretti sufrió una descompensación en la apertura de las sesiones ordinarias de la Legislatura provincial.
Mientras daba su discurso, el mandatario comenzó a perder la voz y tuvo que ser asistido por quienes estaban cerca, que se anticiparon ante un posible desmayo. Le pidieron que tomara asiento y abandonó el micrófono.
Minutos más tarde, volvió al atril, pidió disculpas por la situación y explicó que “me descompensé por una lipotimia, no es la primera vez que me pasa”. “Lo había sufrido otra vez que también estaba haciendo dieta. Una vez un doctor me dijo que tome un vaso de gaseosa que se me pasa enseguida”, bromeó y aclaró que “una simple lipotimia no le impedirá cumplir con el deber constitucional”.
La lipotimia es la pérdida repentina y pasajera del conocimiento que se produce por falta de riego sanguíneo en el cerebro.
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