Un alto funcionario del organismo aseguró que «el COVID-19 ha terminado como emergencia de salud pública de importancia internacional».
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que durante este 2023 esperan bajar el nivel de alerta máxima por el COVID-19.
Michael Ryan, en este sentido, señaló que ya «podemos considerar al COVID-19 igual que a la gripe estacional», es decir, «un virus que mata, pero no perturba nuestra sociedad o nuestros sistemas hospitalarios».
La semana pasada, justamente, se cumplieron tres años desde que la agencia sanitaria de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) describiera, por primera vez, la situación como una pandemia. No obstante, el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, insistió en que los países deberían haber entrado en acción varias semanas antes.
Por lo pronto, Ryan subrayó que en este año confían en que se pueda decir que «el COVID-19 ha terminado como emergencia de salud pública de importancia internacional».
Esta crisis sanitaria a nivel mundial se había decretado el 30 de enero del 2020, cuando la OMS decretó el PHEIC (siglas en inglés de Public Health Emergency of International Concern, es decir, Emergencia de salud pública de importancia internacional). En aquel momento el coronavirus registraba 100 casos fuera de China y ningún fallecido.
De todos modos, recién en marzo se declaró la pandemia, cuando la situación empeoró al esparcirse el virus por la mayoría de los países.