Así lo dispuso el Tribunal Oral Federal 4. Aunque el ex ministro se niega, será trasladado obligatoriamente por la fuerza pública.
Aunque Julio De Vido se encuentre tras las rejas por las causas que lo investigan por defraudación en la importación de gas licuado y el desvío de fondos destinados a la mina de Río Turbio, aún debe afrontar el caso que más le preocupa.
La Justicia requirió este viernes que el ex ministro K sea trasladado desde el Penal de Ezeiza para participar de la próxima audiencia por el juicio oral que se lleva adelante por la Tragedia de Once.
Dicho operativo será el próximo 1 de noviembre, fecha en la que fue fijada la continuidad del expediente. En esa sesión comenzarán a declarar los primeros testigos del proceso.
En la última audiencia, el ex superministro del kirchnerismo se había negado a declarar. Por ese entonces, desde el banquillo de los acusados indicó que lo hará «más adelante».
Por la tragedia de Once, ocurrida el 22 de febrero de 2012, De Vido está acusado por estrago culposo agravado y administración fraudulenta, delitos que prevén penas que van de tres a once años de prisión.
