En una charla con Parrilli, la ex presidenta dijo que Pichetto, Gioja, Urtubey y Bossio eran una bandita.
El peronismo evitó retrucar el destrato de Cristina de Kirchner que calificó de «bandita» a un pelotón de dirigentes del PJ. «No hace comentarios sobre escuchas judiciales» dijeron cerca de Miguel Pichetto. Similar argumento deslizó Diego Bossio y José Luis Gioja, jefe del PJ, que hoy reúne al consejo del partido para efectuar su apoyo consensuado al paro del 6 de abril.
En una charla con Oscar Parrilli, captada por orden judicial y luego filtrada a los medios, la ex mandataria minimiza una movida para dividir los bloques del Congreso, que atribuye a «una bandita» que, dice, integran «El Flaco» -por Gioja- «Pichetto, Bossio y Urtubey».
Solo Juan Manuel Urtubey, gobernador de Salta, parado en el podio de peronista que más se expresa contra los K, se subió al ring. Lo hizo para pararse «en las antípodas» de la ex presidente, acusarla de «querer que al gobierno le vaya mal» y opinar que es el «candidato menos competitivo».
«Si se presenta es el mejor negocio político del Gobierno, porque va a ganar más fácil. A mi juicio el candidato menos competitivo que tiene el peronismo es la ex presidenta porque tiene un altísimo nivel de rechazo en la sociedad», fueron las palabras del funcionario.
El que también habló del tema fue el ex ministro Axel Kicillof, que en diálogo con «Radio Con Vos» demostró una inclinación por los sectores del peronismo PJ que apuestan a que la ex presidente no se presente en la provincia y deje ese lugar para otros dirigentes. Se refieren a Florencia Randazzo, que en silencio prepara su candidatura y ya busca aliados para octubre.