El juez López Biscayart también procesó a tres de sus hijos y directivos de su grupo empresarial.
Lázaro Báez, tres de sus hijos y directivos de Austral Construcciones fueron procesados por el juez penal económico Javier López Biscayart por haber evadido impuestos falseando declaraciones, con facturas truchas y usando créditos fiscales inexistentes entre el 2008 y el 2014.
Además, el empresario fue embargado en la cifra récord de 2 mil millones de pesos, unos 45 millones de dólares. Báez ya está procesado por la ruta del dinero K, direccionamiento de la obra pública, Hotesur y Los Sauces, entre otras causas.
Si bien el magistrado dictó el procesamiento sin prisión preventiva pero el artículo 2 de la ley penal tributaria, se prevé una pena mínima de tres años y seis meses de prisión y una máxima de nueve años de prisión.
De esta manera, si es condenado en un juicio oral en esta otra causa sumaría otra sentencia de cumplimiento efectivo y una multa millonaria. El año pasado, López Biscayart había dictado un primer procesamiento por evasión agravada pero para períodos fiscales anteriores al 2008 y con un embargo de 250 millones de pesos. La causa se abrió en el 2013 por una denuncia de la diputada de Cambiemos, Elisa Carrió.
En una resolución de más de 300 páginas, el magistrado también procesó a Martín, Leandro y Luciana Báez y a los directivos o contadores de sus empresas Hugo Uribe, Julio Mendoza, César Andrés, Claudio Bustos, Emilio Martín, María Cristina Gonzalez, Tomás Garzón, Eduardo Larrea y Eduardo Arrejin.
Además, citó a indagatoria al abogado Jorge Chueco, el mismo que intentó fugarse a Paraguay en el 2016, dejó una supuesta carta suicida y hoy está siendo juzgado en el juicio oral por la ruta del dinero K, y a Gastón Lemoine, revelaron a Clarín fuentes judiciales.