El diputado de JxC se defendió de las críticas ya que fue uno de los impulsores de la legislación y aseguró que «cuando pensamos la ley, nunca imaginamos que íbamos a tener un Gobierno que iba a realizar un desastre».
La Ley 27.551, más conocida como ley de alquileres, entró en vigencia desde julio del 2020. Su principal objetivo era regular los porcentajes de aumento que antes solían ser superiores a la inflación.
Con esta normativa, además, los contratos pasaron a realizarse por un plazo de tres años. Ante este panorama, los propietarios sostienen que este tiempo es demasiado largo como para fijar condiciones en este escenario macroeconómico, subsumido por la alta inflación.
Uno de los grandes impulsores de la Ley 27.551 había sido el diputado nacional de Juntos por el Cambio, Daniel Lipovetzky. Al respecto, en diálogo con La Vaca Atada por Radio Con Vos 89.9, sostuvo que el dictamen que plantea su coalición «son las modificaciones que hoy la ley necesita pero el Gobierno nunca quiso avanzar y nunca le dieron el visto bueno al planteo de la oposición».
Además, aseguró que desde el oficialismo «piensan en la derogación como una opción». Otro de los puntos importantes del debate es la duración que deben tener los contratos. «El plazo de dos años es una propuesta que está en discusión. En ese momento nos parecía que dos años era muy poco pero 3 años, en un contexto de inflación, parece mucho», comentó Lipovetzky.
Por otra parte, aseguró: «Es injusto que me puteen por la ley de alquileres». Asimismo. agregó: «Las críticas que se le hacen a la ley son críticas por los aumentos de los alquileres y la ley nunca buscó eso. La ley buscaba una regulación en los porcentajes de aumento que antes eran superiores a los valores de la inflación».
El diputado nacional, a su vez, criticó al Gobierno por su mala gestión. «Cuando pensamos la ley, nunca imaginamos que íbamos a tener un Gobierno que iba a realizar un desastre como el Gobierno actual», señaló.
Por último, subrayó que «la ley no salió bien y, por eso, hay que derogarla». No obstante, reconoció que a pesar de que se derogue o modifique la ley, «la gente va a seguir teniendo problemas porque es un problema económico, no de la ley».