El jefe de Gabinete hizo un análisis profundo de los últimos años de la Argentina y destacó que el ascenso de Cambiemos se debe “a un proceso de transformación de la representación política”.
En el marco de la segunda jornada del 53° coloquio empresarial de IDEA en Mar del Plata, el jefe de Gabinete Marcos Peño se hizo presente y sin esquivar a ningún tema, habló de cómo se dio la llegada de Cambiemos al poder y el apoyo de los ciudadanos argentinos.
En su discurso, analizó que “la crisis del 2001 fue una potencial suerte para la Argentina. Se dio un incendio forestal que nos obligó a pensar nuestra política y nuestra representación al mismo que se estaba empezando a producir una de las transformaciones más grande de la humanidad” y agregó que “lo que pasó entre el 2001 y 2015 es parte de esa maduración de un proceso político que se fue armando con experiencias frustrantes que también son necesarias”.
Por otro lado, manifestó que la llegada al poder y la reconstrucción del país no fue fácil ya que “Argentina tiene un Estado tremendamente debilitado: los que se llenaron la boca hablando del Estado, lo destruyeron”. Sin embargo, destacó que “por primera vez podemos salir del populismo económico y político sin crisis”. Y aseguró que “hasta las PASO, mucha gente creía que era una casualidad. Sin embargo, es un proceso de transformación de la representación política”.
También destacó la propuesta que presentó Cambiemos y el apoyo de los argentinos: “En el siglo XX la lógica del poder era de arriba para abajo, era todo más rígido. Hoy vivimos una demanda de la ciudadanía que quiere una horizontalidad mucho mayor”. Y destacó que “hay que empoderar al ciudadano, verdadero actor de transformación”.
Por último, cerró su discurso apuntando al futuro con optimismo: “No hay país que esté ante la posibilidad de hacer algo tan histórico como la Argentina de ahora: podemos convertirnos en un gran país”.