En lo que viene siendo el armado de su gabinete, el presidente electo Javier Milei va conformando cómo será el equipo que lo acompañe a partir de su asunción de gobierno el 10 de diciembre. Y un nombre comenzó a dar que hablar muchísimo: Marina Calabró fue una de las convocadas.
Maite Peñoñori, a través de la red social X, arrojó la bomba sobre el cargo que le ofrecieron a la conductora de La Nación+, como portavoz de la presidencia de Milei, sucediendo a Gabriela Cerrutti, quien fue designada en 2021 por Alberto Fernández.
“Milei le ofreció a Marina Calabró ser su vocera presidencial. ¿Aceptará?”, lanzó la periodista, quien hoy es una de las “angelitas” de LAM.
Y luego se conoció que la respuesta fue negativa. “Tengo una mala noticia, Lanata me va a tener que seguir aguantando. Esta es mi vida, soy periodista y acá me van a encontrar”, se sinceró Marina en diálogo con Poco Correctos, el programa emitido por El Trece.
A continuación, hizo un paréntesis para enviarle un cálido mensaje a Joaquín Álvarez, uno de los conductores. “Un beso al Pollo. Me dejó un mensaje tan lindo en un momento tan feo, eso habla de la calidad humana que tiene”.
Luego de confirmar su separación de Martín Albrecht tras 10 años de amor, Marina Calabró habló de la ruptura que se dio a conocer en las últimas horas, pero que ya lleva casi cinco meses.
“Veníamos charlando mucho porque los dos sentíamos cierta desconexión y cierta distancia. Y a los dos nos empezó a pasar esto de sentir que adoramos al otro, pero que había algunas cosas que como pareja empezaban a no estar”, dijo la columnista en una nota con Teleshow.
Además, Marina dejó en claro que todo se dio en buenos términos: “Fue todo muy charlado, tomándonos mucho tiempo. Y fue muy armónico porque nos adoramos y eso no cambia. Yo lo siento familia y me siento familia. Sé que cuento con él y él sabe que cuenta conmigo. No hubo enojos”.
“Él es una persona que tiene un equilibrio y una paz interior que nunca vi. Así que no hubo discusiones, no hubo tonos elevados. Lo que hubo fue una decisión de dos personas adultas, después de sentarse a charlar largamente, de pasar a otra etapa de la relación. Y de tenernos el uno al otro, pero desde otro lugar. Esta es la verdad. Estoy segura de que, si le preguntaran a Martín, diría las mismas palabras. Pero no porque nos hayamos puesto de acuerdo, sino porque es así”, indicó.