Habló con Ventana Abierta, el Ministro de Justicia y Seguridad de CABA, Martín Ocampo acerca de la seguridad en la Ciudad de Buenos Aires.
Sobre el tema piquetes y como trabaja la policía con esto, Martín Ocampo explicó: “Sabemos que esta situación altera el normal funcionamiento de la Ciudad de Buenos Aires, sobre todo los del centro de la ciudad. Entendemos que hay que tener una mirada que ponga foco a los problemas con resolución sistémica y no esporádica”.
En ese sentido agregó: “Tenemos herramientas de gestión la primera es el diálogo. El 80% de los piquetes son organizados por agrupaciones políticas, sindicales y sociales, pero todas con representaciones políticas. Hay que llegar a un dialogo que haga que primero no se produzca el piquete, para eso hay que trabajar con áreas de desarrollo social y de trabajo en la gestión del reclamo. Si el piquete se hace, hay que encontrar canales para resolver que sea del menor impacto posible. No es lo mismo mil personas cortando la calle que treinta personas».
“Creemos que el Estado tiene que tener presencia para encausar el tránsito y que la Ciudad sea más vivible. Hay gente que aunque se le proponga el diálogo busca un espiral de violencia al que no nos queremos sumar», sostuvo el ministro de Justicia y Seguridad.
Respecto a la formación de la nueva policía, Ocampo dijo: «La primera gran herramienta que tiene un policía es la capacitación permanente. Lógicamente el accionar policial tiene que tener en cuenta siempre el resguardo de terceros. Es cierto también, que los delincuentes no van a andar con vía libre por la Ciudad de Buenos Aires. Hay mecanismo de seguimiento, de control hasta incluso de persecución que se usan para preservar el daño a terceros».
Y siguió: «La Policía de la Ciudad ya está funcionando de forma plena. El problema de la seguridad no es sólo policial, tiene que ver también con el estado del espacio público».
Sobre cómo trabajar con los reclamos de la gente, Martín Ocampo fue claro: «El que corta la calle lo que busca es la visibilidad, busca que los medios de comunicación y la ciudadanía tome contacto con su reclamo. Es central el rol de escuchar y tratar de resolver el problema antes de que el reclamo termine en un corte. También hay otros mecanismos de hacer visibles estos reclamos. La situación llegó a un estado en el cual la noticia es el corte, nadie sabe cuál es el reclamo. La discusión es piquete si, piquete no. Hay que encontrar herramientas de comunicación que ayuden a a resolver este tema que sigue siendo un tema de visibilizar el reclamo”.
Y culminó: “Todo proceso de cambio lleva su tiempo. Gestionar los reclamos va a llevar su tiempo, es un cambio cultural profundo. En forma sistémica, gradualmente buscamos como objetivo que este año haya menos piquetes que el año pasado y así sucesivamente para que se armonice el derecho a peticionar con el derecho a transitar y que todos vivamos mejor en nuestra ciudad».
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