Tras la confirmación de la candidatura de Elisa Carrió en la Ciudad, el Jefe de Estado y la diputada desayunaron en Olivos.
En una reunión que duró algo más de una hora, Carrió comentó a voceros de prensa que «La reunión con el Presidente fue muy divertida, nos reímos mucho y hablamos de todo, definimos la estrategia electoral y el trabajo conjunto en la Ciudad».
El gran objetivo del Gobierno es que de cara al 2019, Martín Lousteau quede fuera de competencia o debilitado y para que esto ocurra, estiman que “Lilita es la llave para eso”.
También saben que el camino no será sencillo, porque la líder del ARI intentará correr de cualquier decisión estratégica al consultor Jaime Durán Barba y pedirá lugares para su gente en la lista de diputados, no solo en tierra porteña. Además puso una exigencia incluso en las nóminas que ella no integrará: les dijo que se reservará el derecho de vetar los nombres que ella asocia con la corrupción.
El presidente Mauricio Macri le dio todo su apoyo a Carrió y le confirmó a la líder de la Coalición Cívica el pedido a sus funcionarios de «cerrar filas y defenderla activamente» y «blindarla» ante acusaciones de sus adversarios. El mandatario expresó su sentimiento: «Para nosotros, Carrió es la esencia del cambio que necesita la sociedad»