Con la presencia de Daniel Scioli en el recinto el oficialismo logró dar media sanción al proyecto impulsado por el presidente Alberto Fernández.
El oficialismo logró este jueves dar media sanción al proyecto de cambios en el régimen jubilatorio, pese a la oposición del interbloque Cambiemos, y con el apoyo de Unión Federal y el Frente de Izquierda.
Tras alcanzar el quorum a último momento gracias a la presencia del nuevo embajador en Brasil, Daniel Scioli, en el recinto, el Frente de Todos consiguió iniciar el debate de la ley, lo que provocó el enojo y la posterior retirada del lugar del grupo de diputados comandado por Mario Negri.
«Hemos podido corroborar que se alcanzó el número del quórum con alguien que ya no es diputado y pertenece al Poder Ejecutivo. Es el caso del ex diputado Scioli, que fue designado embajador en Brasil. Esto es una vergüenza», había expresado el radical Negri tras conocerse la presencia del exgobernador bonaerense, y añadió: “Lamentamos que los demás legisladores de la oposición sean cómplices de esta anomalía; si no se levanta la sesión nosotros nos vamos a retirar y vamos a judicializar esta situación (…) “Llegaron a 129 diputados y usted (Sergio Massa) dio iniciado el quórum necesario con un colega que fue diputado, que dejó el cargo, que tuvo acuerdo en la comisión del Senado y que fue votado por el Senado. Es una situación de anormalidad total”.
El exintendente de Tigre fue el encargado de responderle al diputado de la UCR, aclarando que «hasta que el cuerpo haya aceptado la renuncia del diputado, el diputado sigue siendo diputado. Y este este cuerpo no ha tratado la renuncia de Scioli”, y posteriormente fue el propio Scioli quien tomó la palabra: “Como lo he manifestado, a partir del 3 de marzo me hago formalmente cargo de la embajada. No ha sido publicado todavía el decreto en el boletín oficial, que es a partir de ese momento cuando queda formalizado”
El proyecto aprobado consiste en la suba de los aportes jubilatorios de los magistrados en actividad del 11% al 18%, y eleva de manera progresiva de 60 a 65 años la edad para acceder a la prestación, además de establecer el 82% móvil en base al promedio salarial de los últimos diez años, y no sobre el último salario, como sucede en la actualidad.
