Atribuyen responsabilidad a los productores de alimentos, sosteniendo que los plazos de pago no superan los 30 días.
La pugna entre supermercadistas y productores de bienes esenciales toma un nuevo rumbo con acusaciones cruzadas sobre la responsabilidad de los incrementos de precios en los estantes.
Fuentes del sector supermercadista desestimaron las recientes alegaciones de la industria, que intenta difundir la idea de que los notorios aumentos se deben a plazos de pago de 90 o 120 días, calificando esta afirmación como completamente infundada.
Las fábricas, en su defensa, argumentaron que los incrementos en las listas de precios se deben a los plazos de pago que deben afrontar en medio de un escenario de aceleración inflacionaria.
Desde los supermercados, indicaron que incluso durante la implementación de Precios Justos, los proveedores obtuvieron considerables reducciones en los plazos de pago, pactados de manera oportuna y libre a cambio de la entrega de productos, aunque señalaron que los niveles de entrega siempre estuvieron muy por debajo de lo requerido.
Enfatizaron que todos los proveedores cumplen plazos de pago por debajo de los 30 días. Sin embargo, un informe reciente de la consultora LCG, que evalúa semanalmente el aumento de precios mediante la revisión de 8,000 productos en supermercados, reveló un aumento del 11.5% en productos de primera necesidad entre el 13 y el 20 de diciembre, con un impacto mayor en verduras (18.6%) y carnes (15%). Cabe destacar que este análisis no capturó la disminución de precios en el Mercado de Cañuelas al final de la semana pasada, que ya se ha reflejado parcialmente en los estantes.
