La funcionaria judicial que estuvo a cargo de la investigación durante once meses se defendió de las críticas.
La fiscal Viviana Fein rompió hoy un largo silencio respecto de su actuación en el caso Nisman y dijo que no hubo pruebas concluyentes para asegurar qué ocurrió con el fiscal, de cuya muerte se cumplieron ayer dos años.
Fein se quejó de que su fiscalía, que actuó en el caso durante 11 meses, no recibió pruebas clave que había solicitado.
En este sentido, al hablar en radio Mitre con Marcelo Longobardi, reiteró que lo ocurrido con Nisman pudo ser «una muerte violenta, una instigación o puede ser un acto voluntario, un suicidio».
Las frases más destacadas de la nota:
“Cuando dije que lamentablemente no había rastros de pólvora, lo que quise decir es que no se pudieron encontrar. Si yo hubiese buscado un solo encuadre legal, hubiera emitido un dictamen. Estuve once meses produciendo medidas de prueba que jamás fueron sugeridas por la querella”.
“Mi acción en la causa duró once meses, después asumió la doctora Palmaghini”.
“Nunca recibí ninguna presión. Absolutamente”.
“La causa se mediatizó. Se habla de pruebas que no existen y se tergiversaron resultados que no están”.
“Yo quería tener las pruebas necesarias para sustentar, si hubiese existido, un homicidio con las pruebas. Era una de las tres posibilidades”.
“Se suicidó, lo instigaron al suicidio, o lo mataron. Eso lo sostuve y lo manifesté cuando hablé del famoso entrecruzamiento de llamados del domingo 18, donde durante una larga banda horaria aparecían personajes hablando, algo que no era habitual”.
“Stiuso tomó conocimiento a través de Mazzino de que Nisman lo estaba buscando. Le pregunté por qué no lo llamó y me contestó: «Para no comprometerlo».
“Que Stiuso traiga las pruebas. Si están las pruebas, soy la primera en salir a agradecer al señor Stiuso y a felicitar a la Justicia Federal”.
“Diego Lagomarsino fue imputado por la facilitación del arma. Le solicité a la doctora Palmaghini la prohibición de la salida del país. La tiene desde el primer momento. Y entendí que hasta que no encontráramos una prueba cierta que lo vinculara con la muerte, no podíamos tener esa hipotesis. La jueza tampoco lo hizo y las querellas nunca lo pidieron”.