El ex intendente de La Plata habló sobre el seguimiento hacia su persona durante el gobierno de Macri, y explicó que la AFI contrató empresas para conocer movimientos de mi patrimonio».
El ex intendente de La Plata, Pablo Bruera, se refirió este lunes al seguimiento en su contra que se dio en el marco de la causa por el espionaje ilegal durante el gobierno de Mauricio Macri, y vinculó al actual diputado bonaerense Alex Campbell en la maniobra al asegurar que «era quien requería la información y en algunas cuestiones corregía a la banda».
En diálogo con Ventana Abierta, programa radial que se emite por FM Milenium, quien fuera dirigente del Frente para la Victoria expresó: «El juez ya probó que Campbell, que era en ese momento subsecretario de Gobierno y asuntos municipales, era quien requería la información y en algunas cuestiones corregía a la banda o requería mayor nitidez en la información. La pedía en PDF», y agregó que parte de esa banda «era la que allanaba el departamento de la actual vicepresidenta Cristina Kirchner».
Cabe destacar que quien es actualmente mano derecha de la exgobernadora María Eugenia Vidal, aparece en la causa como una de las personas con quien intercambiaba mensajes el exagente de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Leandro Araque, a través de la intermediación de la excoordinadora de la oficina de Documentación Presidencial, Susana Martinengo.
Además, el ex jefe comunal declaró que el juez Federico Villena, encargado de la causa que tramita en Lomas de Zamora, le comunicó que desde la AFI se interceptaron sus comunicaciones con el Obispo Jorge Lugones pensando que sus conversaciones podían revelar un supuesto involucramiento del Papa en la política.
«Es absolutamente extrafalario. Ellos insistían mucho en mi relación con Lugones pensando que había relación política en el vínculo. Después descubren que tengo un parentezco cercano», dijo y detalló: «Eso les llevó bastante tiempo descubrirlo, y creo que es Campbell el que lo descubre. A pesar de eso me siguieron investigando. Estaban muy interesados en la relación que teníamos con las organizaciones sociales, la participación de Lugones en la lucha contra la pobreza».
En relación a cómo se enteró que había sido víctima de la red de espionaje, explicó que fue el propio Villena quien se lo comunicó tras citarlo a los tribunales de Lomas de Zamora. «No teníamos idea de lo que estaba pasando realmente, más allá de los runrunes que siempre existen. Me llamó un día el juez y me dijo que estaban esta situación. Quería que vaya a reconocer un montón de papeles, fotos, whatsapp’s, informes. Hay cerca de 500 fojas en la carpeta que me involucraba en las escuchas ilegales», explicó Bruera, y cerró: «Contrataron empresas para conocer movimientos de mi patrimonio, entradas y salidas del país. Buscaban qué podían encontrar para explotar algún tipo de situación y evidentemente mucho no han encontrado más allá de que la investigación duró más de un año y medio y que tienen una foja de alrededor de 500 páginas».
