Sobre el acuerdo con el FMI aseguró que Argentina «perdió un escalón de confianza, por motivos internos y externos»
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, fue preciso en su respuesta al ex titular del Banco Nación, Carlos Melconian.»No estuvimos paveando por dos años«, dijo y si bien admitió «errores» en las medidas económicas del Gobierno, defendió el acuerdo con el FMI y negó que el actual sea el peor escenario de la gestión.
«Hay dificultades, pero lo más importante es la responsabilidad de entender lo que se ha logrado, que no creo que sea una cuestión de estar paveando dos años, que se decía en la introducción», consideró el funcionario en respuesta a las críticas de Melconian quien acusó al Ejecutivo de haber estado «boludeando por dos años con las buenas ondas» y previó una suba de la inflación «en la previa de las elecciones».
En una entrevista con el programa La Cornisa, Peña reconoció que la gestión de Cambiemos vive un momento «difícil» pero consideró que en diciembre de 2015 la situación fue «mucho peor» por la falta de reservas en el Banco Central, la parálisis económica y el aislamiento internacional.
En este marco, resaltó el carácter preventivo de la solicitud de un crédito al Fondo Monetario Internacional y justificó: «Perdimos un escalón de confianza, por motivos internos y externos. Estamos ahora un escalón más abajo, para los inversores y para los argentinos, estamos más abajo en la confianza o la credibilidad de que la Argentina pueda llegar al equilibrio«.
Ratificó, en esta línea, el gradualismo que lleva como bandera el Gobierno y pidió «responsabilidad» a la clase política para ayudar al Ejecutivo a salir de la incertidumbre contextual. Además, admitió haber cometido errores como Gobierno y los atribuyó al «exceso de entusiasmo» al momento de asumir.
En cuanto a la meta de inflación que Melconian calificó como «irreal», reconoció que «hay un punto» en la subestimación de la meta de inflación.
Por otro lado, se refirió a las críticas que apuntan a la descentralización de el manejo de la economía en la figura de un sólo ministro «fuerte» que coordine la gestión y defendió el actual esquema desdoblado en Hacienda y Finanzas: «Acá no hay salvadores en esto. ¿Cómo nos fue a los argentinos con un ministro de Economía fuerte? Mal».
