Tras el pedido del abogado defensor, Hugo Tomei, y la aprobación del Servicio Penitenciario Bonaerense, es el juez David Mancinelli quien deberá definir la situación.
Los ocho rugbiers imputados y acusados de asesinar a Fernando Baez Sosa en Villa Gesell, el pasado 17 d ener a la salida del boliche bailable Le Brique, podrían ser beneficiados con la prisión domiciliaria.
Tras sel pedido del defensor de los deportistas, Hugo Tomei, la prueba que los acusados se hicieron de las tobilleras electrónicas y la confirmación del Servicio Penitenciario Bonaerense respecto a la monitoreabilidad de sus domicilios, se envió un informe al juez de garantías David Mancinelli, quien deberá evaluar y definir la situación.
Además, se aguarda por los resultados de la prueba scopométrica, que busca determinar quién pateó a Fernando, a partir de la comparación de la huella levantada en el cuerpo de la víctima y las zapatillas con mancha de sangre secuestradas a los rugbiers en la casa que alquilaban. A partir de la segunda semana de marzo se conocerán también estudios de ADN relacionados al caso.
Por el crimen de Fernando Báez Sosa se encuentran detenidos en el penal de Dolores, Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Blas Cinalli, Luciano y Lucas Pertossi, Matías Benicelli, Ayrton Viollaz y Enzo Comelli. Los ochos rugbiers están acusados de ser coautores del delito de “homicidio doblemente calificado por alevosía y por concurso premeditado de dos o más personas”. En tanto, Juan Pedro Guarino y Alejo Milanesi permanecen en libertad pero están imputados por ser “partícipes necesarios”.