El exPresidente niega haber influenciado contrataciones en medio de acusaciones sobre nexos con Martínez Sosa.
El ex presidente Alberto Fernández ha tratado de distanciarse del revuelo en torno al sector de seguros, luego de ser denunciado por presunta malversación de fondos públicos, entre otros delitos, debido a la presunta contratación de un «broker y empresas privadas» para intermediar en la gestión de seguros en dependencias oficiales.
Se le imputan, entre otros delitos, malversación de fondos públicos, violación de deberes de funcionario y abuso de poder, en relación con los contratos de gestoría establecidos durante su presidencia a favor de Héctor Martínez Sosa, amigo personal del ex presidente y esposo de María Cantero, histórica secretaria privada de Fernández.
Varias fuentes afirman haber recibido llamadas de Cantero, quien ha colaborado con Alberto Fernández durante 30 años, solicitando en diversas entidades gubernamentales la designación de Martínez Sosa como proveedor de seguros.
El decreto de Fernández establecía que los contratos debían realizarse mediante convenio interadministrativo para la administración central, mientras que otras entidades como empresas públicas y entes fiduciarios debían seguir los procedimientos de sus respectivos regímenes de contratación. Se prohíbe explícitamente la subcontratación de las pólizas, aunque no se menciona expresamente la exclusión de gestores.
El ex presidente ha buscado tomar distancia, negando haber realizado gestiones con funcionarios para contratar a Martínez Sosa y afirmando que tampoco le pidió a Cantero, su secretaria, que lo hiciera.
Denunciaron a Alberto Fernández por presuntas irregularidades en los seguros de los créditos de ANSES.
«Dudo que ella haya hecho algo así; si lo hizo, no lo avalo; nadie te dirá que pedí por alguien; yo lo dudo, pero no puedo garantizar que ella no haya hecho algo así; si fue así, se extralimitó», aseguró Alberto Fernández a La Nación.
La práctica denunciada en la justicia obligaba a las dependencias estatales a canalizar los contratos a través de Nación Seguros, empresa que a su vez contrataba a un bróker y a empresas privadas, algunas relacionadas con Fernández y Sergio Massa. Entre los intermediarios figuraban Pablo Torres García, cercano a Sergio Massa, y Martínez Sosa, esposo de la secretaria del ex presidente.
Fernández afirmó que «nunca» habló con Martínez Sosa sobre su papel como intermediario en el Estado, con comisiones millonarias.
