Se trata del exagregado cultural y uno de los principales acusados de volar la AMIA, según la investigación de la justicia argentina.
Luego de las repercusiones del estreno de Netflix y en un nuevo aniversario de la muerte del fiscal Alberto Nisman, quien habló sobre el hecho que aún no tiene respuesta de lo que sucedió fue Mohsen Rabbin, uno de los principales acusados por el atentado a la AMIA.
En declaraciones a Mañanas Sylvestres por Radio La Red, el exagregado de la embajada de Irán en Buenos Aires consideró que “es probable que lo hayan inducido a Nisman a que se mate porque no tenía nada de pruebas”.
El exagregado de la embajada, también aseguró que el extitular de la AFI AMIA recibía financiamiento externo de EEUU e Israel para apuntar contra Irán. Sin embargo, Nisman contaba con recursos reservados dados por el gobierno del por entonces presidente Néstor Kirchner que le permitían investigar a fondo cualquier pista.
Pese a las acusaciones que pesan en su contra, Rabbani nunca se presentó ante la Justicia argentina para ser indagado. Este viernes dejó en claro que no tiene intenciones en colaborar con la investigación. “No queremos perder el tiempo”, contestó cuando le consultaron y desvió el foco de la atención en varias oportunidades de la entrevista para hablar sobre la tensión en Medio Oriente.
“Irán no tiene nada que ver con el tema de la Amia. Quienes lo hicieron, están amenazando, no dejan aclarar, no quieren que la gente conozca la verdad. No lo dejaron declarar, no dejaron que la gente conociera la realidad; cuando Nisman quiso ir a la asamblea nacional argentina y todos lo esperaban, a la noche dijeron que había fallecido, que había muerto… ¿Quién lo mató?”, se preguntó.
De acuerdo a su teoría, Irán y la Argentina tenían una “excelente relación comercial” antes de la voladura de la mutual judía y esa cuestión generó el enojo de los Estados Unidos. El clérigo defendió el memorándum con Irán impulsado por Cristina Kirchner en su segundo mandato. Dijo que la actual vicepresidenta “quiso resolver el tema y no la dejaron”.
“No quieren esclarecer el tema. Cuando el gobierno de Cristina e Irán hicieron un tratado, ellos debían apoyar esto. Encima calumniaron y acusaron a los ministros. Entonces, ¿qué podemos hacer hoy? Es un grupo que no escucha la ley, no quiere conocer las pruebas. Es un grupo al que solo le interesan las mentiras. Si no quisieron hacer nada, ¿por qué voy a declarar ahora? Esto es una cortina de humo y siguen con esto porque es un negocio”, puntualizó.
El tratado internacional que se encuentra bajo la lupa de la Justicia, procesó y ordenó detener no sólo a la expresidenta sino también a varios exfuncionarios de su gobierno que participaron de las negociaciones.