Carlos Acuña, uno de los miembros del triunvirato de la central obrera, aseguró que es «la única herramienta» que les queda si se llega a aprobar la reforma en Diputados este lunes.
El secretario general de la CGT Carlos Acuña advirtió que si este lunes se aprueba la reforma previsional «puede llegar a haber un paro general a partir del mismo día» en tanto que puntualizó: «Es la única herramienta que nos queda, no es porque a nosotros nos guste parar, no tenemos otra forma».
El titular del Sindicato de Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio, Garages, Playas de Estacionamiento, GNC, Lavaderos Automáticos y Gomerías (Soesgype) aseguró en declaraciones a Radio 10 que la central obrera ha «acompañado tratando de no poner piedras en el camino, ni palos en la rueda, pero llegan momentos en donde no da para más la situación«.
En este sentido, consideró que el presidente, Mauricio Macri, debe «tomar consciencia de esto», «tener más equilibrio», «prevenir todas estas cosas» y «no dejarse llevar solamente por los que hablan solamente de economía técnica y no de la economía real, de lo que consume la gente». «No estamos bien, esta es la realidad», disparó el gremialista.
Por otro lado, se refirió al compromiso que tomó el Gobierno en un acuerdo con diputados y gobernadores para otorgarle a los jubilados con menores haberes y beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH) un bono compensatorio por única vez en marzo y calificó la medida como «una vergüenza».
«Si dan un bono, es porque saben que están haciendo un perjuicio al poder adquisitivo», sostuvo, y remarcó: «Le pedimos a los gobernadores que no piensen solamente en mantener la caja sin hacer ningún esfuerzo y pedirle un esfuerzo a los jubilados. Es una vergüenza. Y el diputado que es peronista no puede hacer lo que está haciendo, si es que alguno va a apoyar lo que perjudica a los jubilados y a quienes reciben la AUH».
En cuanto a los incidentes ocurridos frente al Congreso mientras se realizaba la fallida sesión por la aprobación del proyecto de ley, el integrante de triunvirato de la CGT, opinó que el Gobierno fue «el primer responsable» al disponer «la cantidad de Gendarmes que pusieron en la calle».
