La titular del organismo, Laura Alonso, dijo que el uso del helicóptero presidencial por parte de la Primera Dama, Juliana Awada, para regresar del balneario uruguayo de Punta del Este, es “correcto”, ya que no incumple los parámetros de “prudencia y austeridad” que manda la ley de Ética Pública.
“El jefe de Estado y su núcleo familiar están protegidos por la Casa Militar, que le brinda los servicios de seguridad. Sus traslados deben realizarse en vehículos oficiales, por lo tanto está cubierto por la Ley de Ética”, explicó Alonso en diálogo con radio Mitre.
Alonso agregó que, antes del viaje del helicóptero a Punta del Este, la Secretaría General de la Presidencia hizo una consulta a la Oficina Anticorrupción, para que analice la situación.
“A la primera dama, que cumple funciones protocolares, también se le aplican los deberes previstos en el Código y la Ley de Ética Pública, lo que quiere decir que debe utilizar en su función protocolar los bienes con austeridad, responsabilidad, honradez y prudencia”, aclaró.
Laura Alonso diferenció la situación de otros usos de los bienes del Estado, como el de la flota de aeronaves “para mandar diarios impresos a otras provincias” o el uso de un “avión sanitario” para un viaje de descanso.
“Hay poner la discusión de la ética y la integridad pública en la agenda”, dijo Alonso y estimó que “lo que es incorrecto es el abuso” de los bienes del Estado.
(Fuente: Será Justicia)