El ex contador amplió su declaración para convertirse en arrepentido en la causa de los cuadernos.
Luego de la gran repercusión que tuvo el presunto pago de una coima de 10 millones de dólares al juez federal Luis Rodríguez para beneficiar al ex secretario privado de Néstor y Cristina Kirchner en una causa por enriquecimiento ilícito, una nueva bomba judicial estalló en los pasillos de Comodoro Py.
El ex contador de la familia Kirchner, Víctor Manzanares, amplió su declaración como pretenso imputado colaborador en el expediente de los cuadernos de las coimas y reveló que el ex magistrado Norberto Oyarbide -todavía en funciones- se encargó de alterar una pericia clave para poder sobreseer al ex presidente en un delicado caso que lo investigaba por enriquecimiento ilícito.
En la cárcel por haber obstruido a la justicia en la causa Los Sauces -que investiga el supuesto lavado de dinero a través del alquiler de propiedades por parte de esa sociedad perteneciente a la ex familia presidencial- Manzanares consiguió este jueves firmar un acuerdo de colaboración con el fiscal Carlos Stornelli.
Para que sea declarado formalmente como arrepentido, Manzanares deberá aguardar el visto bueno del juez Claudio Bonadio.
De acuerdo al testimonio de Stornelli a los medios, “Manzanares aportó mucha información sensible respecto a propiedades y bienes no registrados por parte del entorno del ex secretario de Néstor Kirchner Daniel Muñoz, y muchos otros datos de interés para la investigación por corrupción entre los contratistas del Estado durante el kirchnerismo”.
Aunque otra de las afirmaciones del contador preso desde julio de 2017 apunta contra el ahora jubilado juez Norberto Oyarbide, quien nueve años atrás sobreseyó a Néstor Kirchner por irregularidades en sus declaraciones juradas de bienes que el mandatario había presentado, según las cuales en un solo año había logrado un crecimiento patrimonial del 158%.