El titular de la AFI fue imputado por recibir pagos desde la empresa brasileña Odebretch en 2013.
El jefe de la central de inteligencia argentina (AFI) Gustavo Arribas ingresó a las 11:24 a los tribunales federales de Retiro para declarar por las presuntas coimas recibidas por un arrepentido brasileño en el caso llamado Lava Jato. Se da tras ser imputado por el fiscal Federico Delgado, luego de que la diputada Elisa Carrió confirmara su denuncia.
Mediante un escrito ante el juez federal Ariel Lijo, el funcionario acusado negó «rotundamente» las sospechas de corrupción en su contra por el caso Odebrecht y afirmó que «no es la primera vez» que quieren «difamarlo» desde que está al frente de la agencia de espías.
«He venido a ponerme a disposición de la Justicia, que es mi obligación como funcionario público. La Justicia es el ámbito en el que cual todos estos hechos van a quedar aclarados. Respecto de la prensa, ayer emití un comunicado y es todo lo que tengo que decir al respecto. La única prueba que tengo que presentar es ante la Justicia y voy a hacer todo lo que esté a mi alcance para que todo esto se aclare y quede terminado», declaró al salir del Edificio.
